Refugio
en el Lugar
A veces, lo mejor ante una emergencia es refugiarse en casa o en una zona segura designada hasta que sea seguro salir.
Esta estrategia se utiliza a menudo durante emergencias como pandemias, vertidos químicos, actos de violencia o fenómenos meteorológicos graves, cuando salir de casa podría ponerte en peligro.
Cómo prepararte:
- Crea un Kit de Refugio en el Lugar: Abastécete de suministros esenciales como alimentos no perecederos, agua, medicamentos y material de primeros auxilios.
Asegúrate de tener suficiente para varios días en caso de que no puedas salir de casa. - Prepara tu casa: Identifica una habitación o zona segura en tu casa donde puedas refugiarte durante una emergencia.
Este espacio debe estar alejado de ventanas y puertas y ser fácilmente accesible para todos los miembros de tu hogar. - Mantente informado: Ten a mano una radio a pilas o un dispositivo portátil para recibir alertas de emergencia y actualizaciones.
Permanece atento a las noticias locales y a los canales oficiales para recibir instrucciones sobre cuándo es seguro salir de tu refugio. - Comunica tu plan: Comparte tu plan de refugio en el lugar con familiares, vecinos y cuidadores.
Asegúrate de que todos saben qué hacer y adónde ir en caso de emergencia. - Practica regularmente: Realiza simulacros y practica el refugio en el lugar con tu familia.
Familiarízate con los procedimientos y asegúrate de que todos saben qué hacer en diferentes situaciones.
Durante el refugio en el lugar:
- Permanece en el interior: Una vez que estés en tu zona de refugio, quédate quieto hasta que las autoridades den la señal de «todo despejado».
- Sella la zona: Cierra y sella ventanas, puertas y rejillas de ventilación para impedir que entre aire del exterior.
- Vigila la situación: Mantente informado sobre la situación de emergencia y sigue las instrucciones de las autoridades locales.
- Mantén la calma: Mantente a ti mismo y a tus seres queridos tranquilos y calmados.
Utiliza distracciones como juegos, libros o música para pasar el tiempo.
Si estás preparado, te mantienes informado y pones en práctica tu plan, podrás protegerte a ti y a tu familia en caso de catástrofe.